Your cart
No hay más artículos en su carrito
El reciclaje forma parte de nuestra vida y está a la orden del día actual para contribuir a un mundo mejor. Al igual que el cartón, el plástico o el vidrio, las bombillas tienen su contenedor específico para depositarlas una vez se haya agotado su vida útil o bien porque se han estropeado.
En esta entrada vamos a hablar de cómo reciclar las lámparas fluorescentes compactas conocidas también como CFL por sus siglas en inglés: Compact Fluorescent Lamp.
Este tipo de bombillas tienen una vida útil más larga y consumen menos energía, cosa que contribuye al ahorro energético que todos buscamos hoy en día, pero muchos desconocemos dónde hay que dirigir este artículo una vez ya deja de ser útil.
Las bombillas ahorradoras (CFL) contienen pequeñas cantidades de mercurio y por ello es conveniente depositarlas en un punto limpio, ferreterías o supermercados adheridos a Ambilamp, ya que los distintos materiales que la componen pueden ser reutilizados o reciclados.
Si desafortunadamente su bombilla se ha roto le aconsejamos las siguientes recomendaciones:
- Asegúrese de que no hay ninguna mascota en la habitación
- Ventile la habitación entre 5 a 10 minutos abriendo puertas y ventanas.
- Apague el sistema de ventilación y aire acondicionado si dispone de uno.
- Reúna los materiales necesarios para recoger la bombilla rota (preferentemente que sea una escoba y una bolsa para depositar los restos)
- Tenga cuidado al recoger el cristal roto y el polvo visible y hágalo de manera manual evitando aspiradores.
- Coloque los restos en una bolsa independiente y ciérrela.
Ambilamp es una asociación que facilita contenedores y puntos limpios para desechar artículos de iluminación y podrán encontrar los distintos puntos de recogida a través del siguiente enlace:
https://www.ambilamp.es/busca-tu-contenedor
Además de las lámparas fluorescentes compactas, en este caso deberíamos incluir también los tubos fluorescentes, bombillas de descarga y bombillas y tiras de LED.